Los fertilizantes orgánicos son productos naturales que mejoran la calidad del suelo y aportan nutrientes esenciales para el crecimiento saludable de las plantas. A diferencia de los fertilizantes químicos, estos provienen de materiales biodegradables como compost, estiércol o restos vegetales.
Beneficios de usar fertilizantes orgánicos
- Mejoran la estructura del suelo, aumentando su capacidad para retener agua y aire.
- Proveen nutrientes de forma gradual y sostenida, evitando la sobre-fertilización.
- Fomentan la actividad biológica del suelo, promoviendo microorganismos beneficiosos.
- Son amigables con el medio ambiente y seguros para plantas, animales y personas.
¿Cómo elegir el fertilizante orgánico adecuado?
Es importante considerar el tipo de planta que querés nutrir y las características del suelo. Algunos fertilizantes orgánicos están formulados para huertas, otros para plantas ornamentales o frutales. También podés optar por opciones caseras como compost o humus de lombriz, que son muy efectivos.
Consejos para usar fertilizantes orgánicos
- Aplicá el fertilizante en la base de la planta, evitando contacto directo con las hojas.
- Respetá las dosis recomendadas para no saturar el suelo.
- Complementá con riego adecuado para facilitar la absorción de nutrientes.
- Incorporá fertilizantes orgánicos regularmente para mantener el suelo saludable a largo plazo.
Con los fertilizantes orgánicos, podés cuidar tus plantas de manera natural, mejorar la salud del suelo y contribuir a un ambiente más sustentable.