Los soportes para colgar platos decorativos son piezas que se fijan a la pared para exhibir vajilla o piezas artísticas sin ocupar espacio en muebles. Te permiten crear una galería personal y cambiar el look del ambiente con facilidad.
Materiales y acabadosPodés elegir entre opciones de metal lacado, hierro forjado o acero. Los acabados más comunes son negro mate, bronce, plateado y blanco. Elegí un material resistente al peso del plato y al desgaste diario. Si la pared es de cocina o baño, buscá acabados resistentes a la humedad.
- Metal lacado o hierro forjado para un look clásico
- Acabados modernos como negro mate o bronce para un estilo industrial
- Tornillos y taquetes compatibles con el material de la pared
Antes de colocar el soporte, medí y marcá la ubicación. Seguí estas pautas simples:
- Elegí un punto a la altura de los ojos para mayor visualización
- Usá taquetes y tornillos adecuados al tipo de pared
- Asegurá el plato en el soporte antes de colgarlo para evitar caídas
- Si tu pared es lisa y la pieza es liviana, hay opciones de adhesivo; para platos pesados, mejor perforar
La instalación suele ser rápida y podés hacerlo con herramientas básicas como un taladro y destornillador.
Consejos de decoración- Combina platos de diferentes tamaños para un efecto dinámico
- Hacé una galería con colores o motivos similares para cohesión visual
- Dejá un margen de respiración entre piezas para que cada plato destaque
- Mantén la altura alrededor de 150–165 cm desde el piso para una lectura óptima
- ¿Qué peso soportan? Varía por modelo; consulta la ficha técnica. En general, cada soporte puede sostener desde medio kilo hasta varios kilos, dependiendo del diseño y del muro.
- ¿Se pueden usar sin perforar? Sí, existen ganchos adhesivos o ventosas para superficies lisas, pero suelen ser menos estables para piezas pesadas.
- ¿Qué tipo de platos convienen? Platos de cerámica, porcelana o decorativos de vidrio o cristal ligeros, preferentemente de tamaño mediano.