- Precio más accesible en comparación con las nuevas.
- Opción ecológica, ya que reutilizás componentes en buen estado.
- Variedad de modelos y marcas en el mercado de segunda mano.
- Estado de las llantas: revisá que no tengan grietas ni deformaciones.
- Tipo de eje y compatibilidad con tu bici.
- Estado de los rodamientos y ejes para asegurar un giro suave.
- Verificar que las llantas sean compatibles con tus frenos (disco o V-brake).