Quiero a mi fusil más que a ti
Kayla Williams
Barcelona: Editorial Entrelibros, 2005. ISBN: 849651708X. Láminas con fotos en b/n. Muy buen estado. Tapa blanda. 23 x 15 cm.; 278 páginas.
¿Cómo es realmente ser joven y mujer en el ejército americano?
Kayla Williams, antigua sargento en una compañía de inteligencia militar de la 101 División Aerotransportada del ejército norteamericano, lo cuenta con sus propias palabras.
Sobre el papel de las mujeres en el ejército: “La gente llega a la conclusión de que las mujeres no entran en zonas de combate. Chorradas”.
Sobre el sexo: “Seamos realistas. El ejército no es un monasterio”.
Sobre el aspecto en zona de guerra: “Todas las chicas obtienen probablemente tres puntos extras como promedio en una escala sobre diez. Muy útil”.
Sobre las guardias nocturnas: “Estábamos bastante paranoicos. Oímos aullar a perros vagabundos por todas partes, toda la noche. ¿Se supone que hemos de intentar comunicarnos con las personas sospechosas o se supone que hemos de disparar de inmediato?”.
Sobre los iraquíes: “Les llamábamos moracos, camelleros o jodidos paletos, expresiones que garantizaban que no los considerábamos personas; padres, hijos o hermanos de alguien”.
Sobre los interrogatorios militares: “No delaté a nadie. ¿Cuánto tengo de moralmente culpable?”
Sobre la vuelta a casa: “Meses después de mi regreso echaba en falta tener un arma en las manos. Continuamente”.