Si buscás un espacio de juego seguro y divertido para tus chicos, los peloteros infantiles pueden ser la opción ideal.

Un pelotero infantil es una estructura acolchada, suele tener paredes suaves y está llena de bolitas de colores. Los niños entran, gatean, se zambullen y juegan sin golpes duros ni riesgos de lesiones. Es perfecto para la sala de juegos, el cuarto de tus hijos o un rincón de entretenimiento en casa.

• Amortigua caídas y movimientos bruscos gracias al relleno blando y las paredes acolchadas.
• Materiales seguros y fáciles de limpiar, como vinilo resistente o tela suavemente acolchada.
• Fácil de montar y, muchos modelos, plegables para guardarlo cuando no se usa.
• Ideal para desarrollar coordinación, motricidad fina y socialización entre niños.

• Tamaño y espacio: medí el lugar disponible para que entre sin complicaciones.
• Edad recomendada: buscá modelos compatibles con la edad de tus hijos (p. ej., 6 meses a 4 años).
• Seguridad: costuras reforzadas, bordes suaves y ausencia de piezas pequeñas desprendibles.
• Facilidad de limpieza: superficies lavables y limpieza de las bolitas si aplica.
• Accesorios: funda protectora, bolsa de transporte o cubierta impermeable pueden sumar valor.

Para que dure más, limpiá con un paño húmedo y detergente suave. Seca bien antes de volver a usarlo, y revisá regularmente las costuras y las bolas para asegurar que todo siga en buen estado.

• ¿Qué edades son adecuadas para los peloteros infantiles? En general, son ideales para niños pequeños, desde los 6 meses hasta los 4–5 años, siempre bajo supervisión.
• ¿Se pueden usar en exterior? Sí, pero conviene hacerlo con techo o sombra y elegir modelos con revestimiento resistente al sol y a la humedad.
• ¿Qué incluye el producto? Por lo general, la estructura acolchada y las bolitas de colores; algunos kits traen funda o bolsa de transporte.
• ¿Cómo se limpia? Con paño húmedo y detergente suave; evitar productos agresivos y dejar secar completamente.