Una pc gamer gama media es un equipo equilibrado que combina rendimiento suficiente para la mayoría de juegos modernos con un precio razonable. Es ideal si te interesa jugar en 1080p con configuraciones altas o en 1440p con ajustes medios. El objetivo es lograr buena tasa de frames sin gastar en la gama top.
Componentes clave- CPU: buscando 6-8 núcleos modernos (por ejemplo, Ryzen 5 5600/5600X, Intel Core i5 de 12ª-13ª generación).
- GPU: tarjeta gráfica de gama media actual (ej.: RTX 4060/4060 Ti, RX 7600/7700) según tu presupuesto.
- RAM: 16 GB DDR4/DDR5 (2x8 GB) para evitar cuellos de botella multitarea y en juegos.
- Almacenamiento: SSD NVMe de 512 GB o más; 1 TB si vas a instalar muchos juegos.
- Fuente: 550-650 W con certificación 80+ Bronze o mejor.
- Placa madre compatible: chipset B550/B660 o similar; soporte de puertos y expansión.
- Enfriamiento y gabinete: flujo de aire decente y un par de ventiladores para mantener temperaturas estables.
Con una configuración de gama media, la mayoría de títulos modernos se juegan a 1080p con ajustes altos y entre 60 y 144 fps, dependiendo del juego. En títulos muy exigentes, podrías ver 1080p con calidad media o 1440p con ajustes medios.
Cómo elegir dentro de la gama media- Presupuesto y resolución objetivo: si querés 1440p, priorizá una GPU con más VRAM y un CPU capaz.
- Cuello de botella: evita combos donde la CPU sea demasiado débil para la GPU (o viceversa).
- Futuras ampliaciones: buscá una fuente y motherboard con margen para upgrade.
- Ruido y calor: opciones con mejor enfriamiento y gabinete con flujo de aire ayudan a mantener el rendimiento sostenido.
- Compará precios y lee reviews de rendimiento en juegos específicos que te interesen.
- Considerá una configuración base y planificá upgrades posteriores (RAM, SSD, GPU).
- Si preferís evitar ensamblaje, hay PCs preconstruidos de gama media con buena garantía y soporte local.
- Limpieza periódica de ventiladores y filtros para evitar polvo.
- Actualizá drivers de GPU y BIOS cuando corresponda para sacar rendimiento y estabilidad.
- Chequeá temperaturas bajo carga para evitar cuellos de botella térmicos.